
Después de años de inactividad, la tronquera ubicada en el Delta volvió a ponerse en marcha, marcando un paso importante para la logística y el trabajo de los isleños. La reactivación de este mecanismo, fundamental para el traslado de troncos y materiales por canales internos, fue celebrada por vecinas y vecinos que desde hace tiempo reclamaban soluciones concretas para la vida cotidiana en la isla.
En la gestión del proceso tuvo un rol clave Malena Galmarini, ex presidenta de Agua y Saneamientos Argentinos S.A. (AySA), quien se involucró personalmente en las gestiones para recuperar esta herramienta esencial para la producción local. “No se trata solo de un sistema hidráulico, se trata de mejorar las condiciones de vida y trabajo en el Delta”, señalaron desde su entorno.
La tronquera había quedado fuera de funcionamiento en los últimos años, generando serias dificultades para quienes dependen del transporte fluvial de carga pesada, especialmente troncos, leña y materiales de obra. Su recuperación no solo alivia esos traslados, sino que además representa una señal de que, con voluntad política, es posible reactivar servicios que parecían olvidados.

La imagen de la maquinaria otra vez en movimiento es, para muchos, una postal de esperanza. “Volvió la tronquera, volvió una parte de nuestra vida isleña”, comentaban hoy varios vecinos, entre canoas, motoras y mate compartido.